Entramos como Arquidiócesis de Bogotá en el tercer año del Camino Discipular Misionero, dedicado a la siembra de esperanza. Después de reconocer las semillas y haber salido a las periferias de nuestra ciudad como misioneros, sembradores, nos disponemos para festejar la esperanza. En sintonía con la Iglesia universal, transitamos este año en ambiente jubilar como peregrinos y profetas de esperanza y lo hacemos juntando fuerzas con las jurisdicciones eclesiásticas que componen la provincia de Bogotá.
Presentamos a toda nuestra comunidad arquidiocesana esta primera entrega de una serie de insumos que nos ayudarán a cada uno, como peregrinos de esperanza, a disponer el corazón en comunidad a este bello tiempo jubilar; a través de una serie de catequesis muy sencillas y prácticas, que podemos desarrollar en nuestra casa, comunidad o parroquia profundizaremos, con el tiempo de Adviento y Navidad, en los signos que acompañarán este Jubileo de la Esperanza y profundizaremos en la importancia del jubileo.
Agradecemos a las diócesis de Zipaquirá y Girardot que nos ofrecen y nos ofrecerán durante este año litúrgico esta serie de ayudas que nos disponen por medio de la oración y la meditación, a celebrar con profundo espíritu cristiano el Jubileo de la Esperanza.