
La Virgen del Carmen engalanó la Catedral Primada
El llamado fue claro, el cardenal Salazar recalcó: “Esta advocación en la que se invita a seguir el ejemplo de María debe hacerse visible, no es solo venerar a “Nuestra Madre, es hacer el propósito de revisar nuestras vidas, el corazón, para callar los odios, las injusticias, la violencia, todo aquello que maltrata a los demás”.
“Debemos preguntarnos si verdad queremos cambiar ya que muchas veces nos sentimos cómodos al agredir a los otros, vivimos convencidos de que somos buenos y que los malos son los demás y son ellos los que deben cambiar”, agregó.
Invitó finalmente a la transformación profunda como individuos, como familia, como sociedad y por supuesto como país. A continuación, la homilía completa del señor cardenal Rubén Salazar Gómez, arzobispo de Bogotá:
El escapulario: Compromiso de imitar a María
Recordemos que a Nuestra Señora se le llama "Estrella del Mar", porque la Virgen es la estrella que nos conduce al encuentro con Jesús. A la Virgen del Carmen también se le conoce como la patrona de los conductores terrestres, marítimos y de los comerciantes.
Este año, a la Catedral Primada acudieron centenares de feligreses quienes portaban el escapulario, como signo tradicional de la devoción mariana en la Iglesia desde hace siete siglos. Rosas de todos los colores, bendición de los escapularios, bendición a los niños y acogida especial de los visitantes, engalanó esta solemnidad.
En algunas órdenes religiosas como el Carmelo, el escapulario se convirtió en su manera de ser y de vivir. Llevar el escapulario es un signo mariano. De recordar a la Virgen María, la madre universal, también de compromiso a imitar sus virtudes, de oración,a través del santo Rosario y por supuesto de protección materna de María, a sus hijos.
Monseñor Álvaro Vidales, párroco de la Catedral Primada, puntualizó sobre el sentido de esta celebración de la Virgen del Carmen. También algunos testimonios de particiapantes en esta Eucaristía: